Ir al contenido principal

Destacados

Hoy me falta un cumpleaños...

 Hoy hubiéramos empezado a mandarnos mensajes y organizar cómo encarar la semana, analizando qué animal sacrificar para las brasas, eligiendo qué bebidas serían adecuadas, en calidad y sobre todo en cantidad... hoy estoy extrañando todo eso... Aún me cuesta creer. Aún me duele hasta el aliento. Esta canción salió hace rato, pero pude llegar a grabarla hoy mismo, porque recién hoy que me quedé sin tu cumple, pude cantarla sin llorar.¿Será el fresco repentino del clima?¿serán los aires de revolución que están empezando a amanecer?,¿será el vino o el fernet? ... no lo sé, pero aquí está  Las dos orillas    La niñez que nunca perdimos hace la plancha en el río mirando a las dos orillas porque sabe que habrá un guiño desde cualquiera. La niñez que flota y deriva busca tu luz en orillas siguiendo caminos de humo ruta azul del infinito que nunca olvida. Ayer es siempre en la memoria aunque el hoy se haya roto mañana veré tu orilla desde el guiño del humo a tu brasa que alum...

Sencillos consejos para evitar la gripe que difunden los cerdos (esos grandes que manejan a los más chicos que usan micrófono y corbata)

Levantarse...
no digo a qué hora ni dónde,
sólo levantarse, siempre levantarse.

Tomarse unos cuantos mates
con yerba rosa que termina en bosque.

Caminar más en directa proporción
a la fealdad del día.

Aspirar el viento frío
de la mañana o de la noche
o de la madrugada (el que tiene olor a pan)
El de la noche tiene olor a noche y nada más
y por eso hace bien.

Darse un toque de humo cada tanto
para contaminarse las profundidades
(no vaya a ser que el exceso de pureza
facilite posteriores desarrollos de la enfermedad)
con tabaco que empieza como Mari
y se vuelve lepidóptero,
armado con la paciencia china
del papel de arroz.

Variar cada tanto con L. Martini mentolados
para abrir las fosas del alma,
pudiéndose variar con los rubios de siempre,
(cosa de confundir al virus malicioso
pues su maldad es directamente proporcional
a su previsible y monótona estructura
y la sorpresa lo mata.)

Acompañar esto con una buena pero prudente
ingesta de Capitán tinto
al que luego se le puede complementar
con algo más volátil
(para que asiente la proteína como decía Julio),
puede ser rubia o morocha la bebida en cuestión,
lo importante es que ronde los cuarenta para arriba
(como el que esto escribe)

Finalmente y para terminar
el día, la noche o lo que sea
buscar un beso en el cual
a modo de intercambio de húmeda experiencia (ver poema anterior)
resumir a modo de recuerdo, y recordar a modo de resúmen:

la succión del mate
la contaminación profunda del humo (no vaya a ser que la pureza...)
y el mareo enajenante del alcohol...

...esta última parte de la sencilla receta
suele ser la más difícil de cumplir
pero hay que levantarse
no digo a qué hora ni dónde,
sólo levantarse, siempre levantarse,
para salir a buscar el beso necesario
al que a diferencia del virus
la sorpresa lo inaugura.

(yo estoy sano, pero eso no quita que este frío me duela lo mismo.)




Comentarios

Mario Edelmiro V. ha dicho que…
Oiga, para consejo anticérdico está muy afilado, ahora resulta que dicen que la sociedad "cambiará los hábitos despues de la mentalidemia" (vaya a saber cuales) por eso me parece que ha dado en las teclas.
Dicen que con altas dosis de besos en sangre el virus se asquea y contrae humanosis lo que los tornaría autoextinguibles, dicen...
Dicen que nos han visto haciendo los tratamientos cumpa!
Dicen que no le afloje.

Entradas populares